Los estándares son fundamentales para los proyectos REDD+. Garantizan la transparencia, la responsabilidad y la eficacia en la reducción de las emisiones de carbono mediante la protección de bosques. Cumplir con estos estándares es esencial para mantener la confianza y demostrar un impacto real y verificable.
Para participar en el mercado de carbono, cada proyecto REDD+ debe ser validado bajo un estándar reconocido, como el Verified Carbon Standard (VCS). Esta validación asegura que el proyecto cuenta con un diseño y una metodología sólidos para lograr reducciones de carbono medibles. Sin esta validación, el proyecto no puede operar.
Algunos proyectos buscan ir más allá y obtener certificaciones premium, como los Estándares de Clima, Comunidad y Biodiversidad (CCB). Estas certificaciones demuestran que, además de reducir emisiones, el proyecto proporciona beneficios sociales y ambientales significativos, como la conservación de la biodiversidad y la mejora de la calidad de vida de las comunidades indígenas.
Una vez validado, el proyecto debe someterse a un proceso de verificación periódica, que implica revisiones por parte de auditores independientes aprobados, para garantizar que siga cumpliendo con las normas y con sus objetivos. Esta verificación continua es esencial para mantener la credibilidad y demostrar que los bonos de carbono reflejan impactos reales.
Más allá de reducir emisiones, los proyectos REDD+ están diseñados para beneficiar directamente a las comunidades locales que protegen los bosques. Los estándares garantizan que los ingresos generados por la venta de bonos de carbono se destinen a estas comunidades, apoyando el desarrollo sostenible, la preservación cultural y la protección de ecosistemas.
Este vínculo directo entre la conservación ambiental y el empoderamiento comunitario distingue a los proyectos REDD+ como soluciones holísticas para abordar el cambio climático.
Dada la complejidad de medir reducciones de carbono y el creciente escrutinio de los proyectos ambientales, la transparencia es esencial. Los estándares proporcionan pautas claras y estructuradas para el monitoreo, la presentación de informes y la verificación, asegurando que cada etapa de un proyecto REDD+ sea responsable.
Estos procesos rigurosos fundamentan la credibilidad del proyecto y su impacto a largo plazo.
El Proyecto REDD+ Matavén demuestra la importancia de los estándares internacionales en la creación de un impacto positivo tanto ambiental como social. Validado bajo el Verified Carbon Standard (VCS) y los Estándares de Clima, Comunidad y Biodiversidad (CCB), Matavén opera con los más altos niveles de integridad y transparencia. Gestionado por Verra, una de las principales entidades de certificación a nivel mundial, estas acreditaciones aseguran que cada bono de carbono se basa en reducciones de CO2 verificadas.
Estos estándares permiten que REDD+ Matavén apoye directamente la acción climática y a las comunidades indígenas que resguardan el bosque de Matavén. Al cumplir con las certificaciones VCS y CCB, el proyecto además de mitigar el cambio climático, también promueve el desarrollo sostenible, la conservación de la biodiversidad y la preservación a largo plazo de los bosques.